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Como Coordinadora de Recursos Humanos de Desarrollo de Personas en Europa para Superior Essex, hay muchos días en los que Elisa Sestito siente que está apagando incendios en la oficina. Luego están las noches, los fines de semana y las vacaciones cuando literalmente apaga incendios..
Elisa, junto a su esposo Gian Lucía, ofrece voluntariamente su tiempo como parte de una unidad de protección civil ciudadana, así como del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Piamonte en la provincia italiana de Alessandria, donde vive la pareja."Ha sido una experiencia increíble para mí", dijo. "Vivimos en un pequeño pueblo de unos 1200 habitantes y si hay incendios en los bosques, a menudo llegamos antes que los bomberos municipales y comenzamos la contención. Luego, nos quedamos y trabajamos para apoyarlos".
Los grupos se encargan habitualmente del mantenimiento forestal, la vigilancia del territorio, la lucha contra las irrupciones, el mantenimiento de puntos de agua, los servicios de defensa civil y la extinción de incendios. También ayudan en las labores de recuperación después de otros desastres naturales en el área al construir ciudades para acampar, buscar a personas perdidas y apoyar a la policía local una vez que se encuentra el área.
En caso de actividad cerca de las casas, los bomberos oficiales deben llegar antes que el equipo voluntario y luego pueden ofrecer apoyo. El equipo es responsable de alrededor de nueve municipios cercanos, como grupo de protección ciudadana civil, aunque apoya a todos los equipos de la provincia de Alessandria y, si es necesario, a los lugares de la región de Piamonte como combatientes de incendios forestales. En caso de emergencias, también se les llama a otras regiones italianas para ejecutar misiones. En concreto, ha trabajado en Calabria, Sicilia, Apulia y Cerdeña para incendios, así como en Emilia Romagna durante una reciente inundación.
Gian Luca lanzó la unidad para ayudar a combatir incendios forestales en la zona. Desde entonces, se ha convertido en una de las más respetadas de la región. Su participación también hizo que Elisa encontrara su pasión por el voluntariado. Anteriormente pasaba su tiempo libre trabajando con niños y personas mayores autistas, pero ahora es integrante de estos departamentos ciudadanos de protección contra incendios.
Esto también cambió la forma en que la pareja pasa sus vacaciones de verano.
Durante el mes de julio, uno de sus voluntarios (un jefe de equipo del equipo de protección civil) participó en una misión en Sicilia. En agosto, Elisa y Gian Luca viajaron desde la región de Piamonte, en el norte de Italia, a Calabria, para ayudar durante la temporada anual de incendios que afecta a la zona. Elisa dijo que la decisión de hacer la caminata de casi 1100 km (665 millas) fue fácil, ya que las áreas de Sicilia, Cerdeña y Calabria a menudo se ven muy afectadas por los incendios forestales.
Gian Luca, quien se dedica a la venta de maquinaria y herramientas para la agricultura, fue nombrado como uno de los líderes operativos de los cuatro equipos que llegaron a la zona. Elisa y Gian Luca fueron asignados al cuarto turno como parte de una rotación que trabajaba durante diez horas por turno y que con frecuencia debía combatir varios incendios al día.
Un incendio que se propagó rápidamente se extinguió justo antes de un final devastador. Los vientos fuertes habían empujado una línea hacia un pueblo y su gasolinera.
"Tuvimos muy poco de tiempo para trabajar, y necesitábamos el apoyo de un helicóptero", señaló Elisa. "Las llamas eran muy altas y seguían cambiando. A nuestro líder de equipo de esa operación le preocupaba que fuera demasiado arriesgado continuar, pero al final, nos quedamos y no permitimos que el incendio llegara a ninguna casa, a los dos centros de producción de petróleo ni a la estación de gasolina".
Varios países como Noruega, Dinamarca, Finlandia, Francia y los Países Bajos, informan que casi el 70 % de sus bomberos son voluntarios. Otros, como Alemania, Austria y Portugal, citan que más del 94 % de los bomberos son voluntarios.
Además, muchos gobiernos europeos tienen fondos limitados para bomberos profesionales, y los voluntarios como Elisa y Gian Luca ayudan en los pueblos pequeños y remotos.
Aunque puede que el éxito en el bosque no se traslade directamente a su función en Superior Essex, la capacidad de trabajar bajo una presión asombrosa es sin duda una habilidad, según Linda Skorb, vicepresidenta sénior y directora de Recursos Humanos.
"Es difícil pensar en un entorno más lleno de presión que en la lucha contra incendios reales", dijo Skorb. "La capacidad de liderar; seguir, tomar y también dar dirección, y pensar críticamente sobre el trabajo en equipo es un conjunto de habilidades de valor incalculable.
Profesionalmente, ella es un activo increíble. Pero lo más importante es que es una persona increíble".